¿Cuál es su producto favorito de Unilever Food Solutions?
La verdad es que la gama de productos es sorprendente y de una calidad excepcional. Además, todos tienen una impresionante capacidad de adaptación a las nuevas cocinas. Personalmente, soy un enamorado de las Primerbas de Knorr, sobre todo, la de Cebolla Dorada; también de las diferentes Salsas. Tienen sabores y texturas increíbles; son versátiles y, con un poco de imaginación, puedes crear platos con gustos muy intensos y potenciados, minimizando costes y esfuerzos.
¿Son productos que facilitan el día a día?
Están diseñados para ahorrarnos tiempo en cocina y facilitarnos la labor. También nos permiten conseguir que todo nuestro equipo elabore las preparaciones con la misma uniformidad, además de que son rentables.
En breve será primavera, ¿cómo debe elaborarse el cambio de carta?
Las cartas no deberían modificarse de una manera radical, sino progresivamente, introduciendo novedades. Un cambio brusco, sobre todo en un restaurante como el mío, con una clientela más o menos fija, implicaría una especie de ‘shock’ al comensal que a lo mejor venía con una idea preconcebida de lo que iba a comer.
¿Cómo es la carta ideal de esta temporada?
Debe contar con sopas y cremitas ligeras, atemperadas y guarnecidas con productos frescos y crujientes. También debe haber ensaladas con todo el aroma de la huerta, con esa carga vitamínica y mineral que tanto necesitamos, y con salsas divertidas y frescas. Carnes y pescados ligeros, enriquecidos con salsas livianas pero con sabor, que nos ayudan a potenciar el producto base y hacerlo más atractivo. Los postres deben ser más ligeros, con un toque de frescura y texturas suaves al paladar. En definitiva, debe haber magia para sonreír al plato.